Más de uno de nosotros ha ido a casa de un amigo a jugar a la consola de la competencia y siempre nos costaba acostumbrarnos al mando. Esto se solucionó en la anterior generación gracias al dispositivo Cronus Max, pero ahora con la nueva generación obiviamente este periférico se ha quedado inútil.
Ha pasado ya un año de la salida de las nuevas consolas y parece ser que por fin podremos jugar con nuestro mando de la consola rival, sin tener que ir cambiando entre uno y otro. Es gracias a la compañia del Cronus Max con la que podremos hacer esto. El método sigue siendo igual al de la anterior generación, a través de un puerto de USB conectaremos el dispositivo, llamado esta vez CronuxMax PLUS, y ya solo tendremos que enlazar el mando.
Con la salida del nuevo mando élite de Xbox abre nuevas oportunidades a los jugones y es que podremos hacer varias mezclas con los mandos de cada una de las compañías en las páginas que fabrican mandos personalizados para así tener un mando que valga para las dos plataformas. A continuación os pondré un video con todo el proceso explicado:
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