Hace tiempo ya lo hizo con una consola Xbox One y ahora Ben Heck nos enseña como ha logrado hacerlo con la Xbox One S. Estamos hablando de transformarlas a un pequeño ordenador portátil poniéndoles una pantalla.
La verdad es que el resultado final es digno de venderse en tienda y si Microsoft le copiara la idea podría obtener grandes resultados. Por el momento nos conformamos con verlo en el vídeo que os hemos insertado al final de la noticia.
Como podéis comprobar en él, el proceso no es para nada sencillo, así que será difícil intentar hacerlo en nuestras casas.